¿Qué es acoso cibernético?

Debido al desarrollo de la tecnología, el acoso no solo se limita al contexto físico y de la vida real, el ciberacoso se refiere a un acto de agresión intencional, llevado a cabo para dañar a otra persona utilizando formas electrónicas de contactos o dispositivos. El ciberacoso incluye enviar, publicar o compartir contenido dañino, falso o malicioso sobre otra persona, como información personal o privada que cause vergüenza o humillación, a veces suelen cruzan la línea hacia un comportamiento ilegal o delictivo. Las comunicaciones permiten a los perpetradores del ciberacoso mantener el anonimato y les da la capacidad de enviar mensajes a una amplia audiencia, siendo capaces de sentir una menor responsabilidad.

Tipos de ciberacoso

En el acoso cibernético incurren una gran variedad de subtipos como los siguientes:

El acoso psicológico: también conocido como intimidación emocional o intimidación mental que incluye comportamiento hostil injustificado, amenazas verbales, acciones intimidatorias y gestos agresivos hacia otra persona. Este tipo de abuso psicológico también puede incluir acoso sexual u otros tipos de acoso que a menudo hacen que sientan avergonzadas o temerosas de la persona que inicia estas acciones.

Doxing: se refiere al acto de revelar abiertamente información confidencial o personal sobre alguien sin su consentimiento con el propósito de avergonzarlo o humillarlo, desde la difusión de fotografías personales o documentos hasta compartir los mensajes personales guardados de un individuo en un grupo privado en línea. 

Acecho cibernético: es una forma particularmente grave de ciberacoso que puede extenderse a amenazas de daño físico a la persona que se dirige. Puede incluir monitoreo, acusaciones falsas, amenazas y suele ir acompañado de acoso fuera de línea. 

Enmascaramiento: El enmascaramiento ocurre cuando un acosador crea un perfil o una identidad inventados en línea con el único propósito de acosar cibernéticamente a alguien. Esto podría implicar la creación de una cuenta de correo electrónico falsa, un perfil de redes sociales falso y la selección de una nueva identidad y fotos para engañar a la víctima. 

Dos ejemplos de casos relacionados a alguno de los tipos de acoso cibernético

Los futbolistas estallan contra los mensajes de odio que reciben en redes: “Espero que te mueras, puto africano”

Los futbolistas, como tantas otras personas relevantes, reciben una cantidad ingente de menciones y mensajes a lo largo del día. Muchos de ellos son de cariño y admiración, pero otros tantos (muchas veces en mayor cantidad) son de todo lo contrario. Amenazas, insultos, racismo y, en resumen, ciberacoso en toda regla.  Desde la Federación Alemana de fútbol se han hartado y han convocado a futbolistas de la Bundesliga y otras ligas a que alcen la voz al respecto. Lo han hecho con una campaña contra el odio en las redes, en la que catorce futbolistas con nombres como Toni Kroos, el francés Dayot UpamecanoNiklas Süle muestran algunas menciones que reciben.

“El ciberacoso es un problema que afecta a toda la sociedad”, apunta Kroos, y recuerda que “lo que se permite hacer a algunas personas de manera anónima en las redes sociales puede ser delito“.

El problema es que, de momento, sólo se están centrando en lo que ocurre en los campos de fútbol, por lo que las menciones redes se han convertido en un Vietnam diario que deben soportar los futbolistas.

Candela Peña lleva su caso de ciberacoso a la policía

La actriz Candela Peña ha decidido tomar medidas en relación a los mensajes de acoso que ha estado recibiendo por las redes y más allá de denunciarlo públicamente a través de los stories de su Instagram, ha pasado a la acción. La artista catalana ha presentado una denuncia ante la policía en una comisaría de Madrid después de las amenazas que ha recibido dirigidas tanto a ella como a su hijo.

Fue a través de sus redes sociales donde Candela Peña sorprendió a sus seguidores al compartir unos mensajes de acoso que le habían llegado por parte de un usuario de redes. “Qué pasa con tu hijo, le voy a matar” decía una de las amenazas que la artista subió a sus stories. Peña compartió los textos para lanzar un grito de socorro. “Os deseo a todos una feliz noche. Esto, lamentablemente, es un ejemplo para demostrar que no ha nacido nadie que apague nuestro camino, porque la luz va en cada uno de nosotros. Quien no tenga, que se apague solo”, escribía tras sus publicaciones.

La protagonista de Hierro lanzó un grito de ayuda a la Policía Nacional ya ha pedido acabar con el anonimato digital haciendo públicos tanto los insultos y amenazas que ha recibido como los perfiles de las personas que los han proferido. “No toleren el maltrato”, “miedo” o “ayuda” son algunos de los mensajes en los que ha etiquetado a la policía.