Mis sentimientos en la Pandemia
La llegada del COVID-19 tuvo muchos impactos en las personas. Ya no se podía salir con las amistades para hablar de la universidad o el trabajo, no se podía celebrar el cumpleaños con toda la familia, no se podía ir a las prácticas de baile, ni siquera se podía ir a la farmacia porque se te acabó el papel de baño. Yo como persona tuve muchas fases de sentimientos en la pandemia y a continuación las estaré presernado en imágenes.
Al comienzo de la pandemia, lo único que podía sentir en ese momento era indiferencia. Eso es algo que siempre ha estado en mí; cada vez que me enfrento a un problema de gran magnitud, mi mente bloquea todo tipo de sentimientos y se queda indiferente. Por lo tanto, al comienzo cuando el número de personas infectadas y muertes empezó a aumentar, yo como que no podía ver la gravedad de la situación. Lo único que importaba era yo y las cuatro paredes de mi habitación.
Luego de tener mis sentimientos anestesiados; comenzó a surgir la ansiedad. Muchos factores tuvieron un impacto significativo a la hora de activar mi ansiedad. La noticia sobre la cantidad de personas que estaban muriendo diariamente en el viejo mundo, afectó significativamente a mi ansiedad. También me afecto mucho fue la nueva modalidad en la cual se están tomando las clases de la universidad. Gracias a esta nueva experiencia he descubierto que no me puedo concentrar en las clases virtuales y eso me frustra porque siento que no estoy aprendiendo adecuadamente las enseñanzas que son esenciales para mi futuro. Pero poco a poco he podido ir modificando la manera en la cual presto atención a las clases y he podido mejorar un poco en ese aspecto.
A pesar de que no estamos al 100% de la normalidad, si hemos llegado al nivel en el cual podemos salir con nuestras mascarillas y así poder sentirnos un poco más seguros/as al salir. En este punto de mi vida he vuelto a mis prácticas de ballet, obviamente utilizando los protocolos de seguridad, y eso me ha brindado una pequeña sensación de normalidad y a su vez he podido tranquilizar la ansiedad que me estaba consumiendo. También es muy importante mencionar las vacunas que han surgido; gracias a ellas hay esperanza de que en algún momento de nuestras vidas vamos a poder volver a lo que la sociedad conocía como normalidad.