El día que capturé a Hato Rey…

Este es mi primer semestre de estudios en Sagrado. Me hizo mucha ilusión sentir que me estaba dando una nueva oportunidad. Dejé todo para lo último: matrícula, pedir la FAFSA, aplicar para el hospedaje y solicitar un préstamo. Recuerdo que, días antes de mudarme, dudé si estaba haciendo lo correcto. No sabía si debía cancelar mi matrícula. Al final, no la cancelé y empecé mi semestre con todas las buenas ganas. Pero el no salir de mi casa desde el 15 de marzo me hace pensar si tomé la decisión correcta.

Quiero que todo sea como antes. Extraño despertar en la cama de mi hospedaje, arropada con tres frisas porque no aguanto el frío del cuarto. Extraño reunirme presencialmente con estudiantes para tomar una clase. Extraño sentirme segura porque hay personas que están para ayudarme en lo que necesite. Y lo que más extraño es sentirme en contacto con lo que me rodea.