El mundo a travez de su historia ha pasado por numerosas revoluciones sociales, culturales y tecnologicas. Desde la invención de la rueda y la maquina de vapor, hasta cohetes que han tocado suelo lunar y computadoras tan poderosas que soportan casi toda la información disponible en el mundo. Cada una de estas invenciones han afectado de distintas formas la manera en que vivimos, interactuamos y nos comunicamos entre nosotros. Por tal razón, creo que de todas estas inmensas invenciones del ser humano, la más poderosa e influencial de todas ha sido y sigue siendo, la Web.

Desde que el internet se comenzó a utilizar como una via para conectar al mundo se rompieron las barreras de lo inimaginable. Mucho de lo que antes se consideraba imposible, ahora está a nuestro alcance con la rapidez de un click. Enviar mensajes instantaneamente, acceder a enciclopedias de información en tan solo segundos, ver que está sucediendo al otro lado del mundo justo cuando está sucediendo. La implementación de este medio en nuestro día a día nos hizo la vida tan sustancialmente sencilla, que nos volvimos dependientes a esta tecnologia.

Como todo en la vida, el Internet, así como la web y otros aparatos digitales que utilizamos en la actualidad, tienen sus ambas caras de la moneda. Por un lado son todo un adelanto para el mundo pero por otro, en ciertos extremos, puede ser un atraso para nuestro desarrollo individual como seres humanos. En lo personal, yo puedo pasar más de un 60% del día utilizando el internet de distintas maneras. Descontando las horas de sueño, creo que no hay otro momento en el día en el que no me encuentre expuesto a utilizar de alguna forma alguno de estos medios ciberneticos. Porque estando en mi hogar lo puedo utilizar para uso personal y de entretenimiento, pero es que ahora es un medio que utilizamos también como recurso en la universidad, también puede estar presente como herramienta en muchos de nuestros trabajos. Voluntaria o involuntariamente, el mundo nos obliga a tener que hacer uso tanto del internet como de todos los artefactos que dependen de el. Y no es para menos, una vez logramos sacarle provecho a esa “cara positiva” del Internet, tenemos en nuestro poder un recurso que nos proporciona infinitas posibilidades.

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El internet puede llegar a sentirse como tener el universo entre las manos, y desde un punto metafórico, esto no es tan equivocado. No me podría imaginar mi vida sin el uso de la Web, seguramente la vida antes tenia esa cálida belleza de la sencillez y la poca complejidad. Pero siento que sin el internet mi vida sería tan limitada y lenta que, aún con todas las cosas positivas que podía tener una vida pasada, me siento agradecido de estar viviendo justo en este momento y lugar en el tiempo. No sé claramente si la dependencia que muchos tenemos a este medio es algo, dentro de ciertos parámetros, positivo o es aquello que nos llevara a la perdición, como dicen algunos. De todos modos, me gusta ser optimista y pensar que estamos viviendo en medio de una revolución y una re-estructuración del mundo hacía un futuro donde las barreras de lo imposible cada vez serán menos. No me puedo imaginar un mundo sin la web, porque dentro de mi percepción, ese sería un mundo con demasiadas barreras.