La joven emprendedora Lizivette Núñez Karry, comenzó su pequeño negocio local hace 2 años junto a su madre con quien creaba la famosa bebida puertorriqueña llamada coquito en el pueblo de San Germán. Al mudarse a Juana Díaz, se reinvento en su pueblo y añadió mas productos al menú como distintos sabores al coquito: nutella, pistacho, el original y con el tiempo tembleque realizado por ella en la temporada de navidad.

Luego del huracán María las ventas fueron muy bajas en la época navideña, por lo tanto, la venta del coquito no fue exitosa. Ahí fue que llego la hora de reinventarse nuevamente, para complacer el paladar del público como acostumbradamente lo hace. La joven, estuvo por mucho tiempo buscando recetas para crear un producto único, con la misma calidad, más o menos materiales parecidos y por último un costo módico para la clientela. Ahí surgen los limbers Bittersweet by Lizi, cuyo nombre contiene un poco de su personalidad.

“Estaba buscando una palabra que me definiera, muchos piensan que soy una amargada pero luego me conocen y cambian de parecer. Algo como “agridulce”. Verifiqué cuantos pequeños comercios tenían nombre similar y lo elegí en inglés.” -así lo explico Lizivette

Comenzó con 6 sabores, el refrigerador de su nevera, materia prima que ya acostumbraba  tener en su casa y una pequeña licuadora. Los primeros fueron probados por su familia y su novio que es experto en el área de cocina. Les encantaron y definitivamente eso fue la señal, para comenzar su nuevo proyecto. Al no tener localidad, su manera de mercadear el producto es por las redes sociales, primero comenzó con una página que había realizado para promocionar su primer artículo, el coquito. No le funcionó, pero no fue razón para rendirse. Comenzó a utilizar un área que nunca utilizaba, los estados de WhatsApp, herramienta que le dejo muy buenos resultados. Al publicarlo en dicha plataforma en menos de una hora había vendido todas sus docenas preparadas y aún así tenía que realizar más para cumplir con las ordenes.

Como dato curioso, por poco daña el refrigerador de su nevera por tantos limbers. Ese fin de semana comenzó a crecer su negocio local. En el cual invirtió su dinero de ganancia en un refrigerador más grande para estar preparada para las próximas ordenes, que seguían pidiendo aun así explicándole que se demoraban. Definitivamente la venta fue muy exitosa.

Comenzó a recibir pedidos que no estaban en su menú, para evaluarlos y crear un sabor único para su clientela. Por esa iniciativa, ha mejorado las recetas a base de los pedidos. Los más vendidos son: coco, maní, nutella, strawberry cheescake y Sara Lee. El menú contiene 13 sabores permanentes y 3 por temporada que son: mangó, StrawberryMango y frutas.

“Cuándo se necesita nuestra mente nos ofrece muchas opciones para impulsarnos hacia adelante. No importa cuán asustado estés y cuánto pienses que puedas perder, INTÉNTALO una y otra vez. Como dicen por ahí… “el que persevera triunfa”. -Lizivette Núñez