Antes de ver la serie Do Not Track, pensé que sería más impactante. Aunque lo fue de cierto modo, no me impresionó mucho; ya me imaginaba cuánta información las páginas Web guardan acerca de los usuarios. Do Not Track simplemente lo confirmó.

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Página inicial de Do Not Track

Lo más impactante que aprendí a través de Do Not Track es ver la manera en que se utilizan los “likes” de Facebook para interpretar que tipo de persona eres, incluyendo hasta los riesgos de salud de una persona. Cuando llegué al capítulo que discute eso, decidí no utilizar mi cuenta de Facebook, así que no pude ver qué se asume de mí al ver que páginas me gustan. Pienso que si hubiera utilizado mi cuenta, probablemente no quisiera volver a utilizar la Web en mi vida. (Luego de escribir este párrafo, volví al episodio para utilizar mi cuenta de Facebook, pero Do Not Track dijo que no tenía suficiente información sobre mí. Me mostró lo mismo que cuando no utilicé mi cuenta.)

Aprendí que a cambio de utilizar páginas Web sin costo alguno, esencialmente nos tenemos que convertir en un producto — del cual solamente se beneficia un grupo de personas desconocidas. Compartimos toda nuestra información con las páginas que utilizamos, y ellos nos utilizan para fortalecer su negocio y ganar dinero. Según Do Not Track, los trackers conocen más acerca de una persona que su esposo o esposa. Esto no debería ser posible o aceptable.

El problema es que la Web roba cualquier tipo de privacidad que los usuarios puedan tener. Sólo basta con entrar a una página web, y ya saben desde dónde en el mundo los estás visitando. Es atemorizante. Cualquier información que se comparta podría caer en manos de personas que desean usar esa información de manera indebida. Datos como el número de tarjeta de crédito, dirección postal, número de Seguro Social, los cuales uno comparte libremente con ciertas páginas Web que cree ser confiables; o datos como la dirección IP, localización, etc., que se comparten inconscientemente. La Web conoce casi cada dato sobre cada uno de nosotros, y no podemos hacer nada al respecto a menos que abandonemos la Web.