Al enterarme que un huracán se aproximaba hacía nuestra hermosa isla los nervios y las ansias eran lo que me consumían. Al principio, el huracán era categoría 2 y así fue aumentado hasta llegar a la categoría 5. ¿Como era posible? ¿Como es que un huracán tan fuerte viene a nuestra isla? me senté junto a mi abuelo y me contó de los huracanes que el había vivido. Las historias eran horribles, como San Felipe dejo a tantas personas sin hogar y sin vida… mi abuela me dijo que cada vez que anunciaban que iba a haber un huracán su mamá comenzaba a llorar a rodillas, por qué ella sabía exactamente lo que pasaría. Su mamá en uno de los huracanes de sus tipos se fue a hospedarse en casa de un primo, al día siguiente regreso a su hogar y no encontraba su casa… su casa no estaba, quedo totalmente destruida. Al escuchar estas historias mi corazón latía un poco mas rápido, los miedos se aumentaban y sabia que las casas de hoy día eran igual a la de aquellos tiempo, pero aun, sabia como iba a destruir a nuestra isla, como no tendríamos luz por varios meses, escuchar las noticias de gente que perdió a su familia, su casa, Puerto Rico iba a cambiar totalmente, ahora mismo si el huracán hubiese pasado hubiésemos deseado que lo único que nos haya pasado fue varios arboles caídos y que no tenemos luz. El día antes de el huracán Irma puse tormenteras en las ventanas, limpie la casa, compramos lo necesario, estábamos completamente preparados. La noche de Irma, trate de actuar como una chica totalmente madura, cuando por dentro me estaba muriendo, pero actuaba como si estaba preparada para lo aproximado, lucí como alguien preparado, la noche paso y el viento estaba fuerte, se escuchaban sonidos extraños, mi familia y yo nos unimos y comenzamos a conversar de distintos temas. La noche se hacia larga, las horas pasaban lento, no tenía señal, no me comunique en los absoluto en las redes sociales, hasta el otro día…. Llego una hora que no había lluvia, no había vientos, me estuvo tan extraño, tenia tantas dudas… ¿O no era categoría 5? ¿No ha comenzado? decidí prender el radio y lo que escuchaba era gente dando gracias a la vida, la gente tan contenta, celebrando. Ahí me di cuenta que el huracán ya no venía y cogió otro camino. Yo no lo creía, pensé que era un sueño ¿Como es que tuvimos tanta suerte? así es la naturaleza… y le doy gracias a madre naturaleza. Estoy contenta que no vivi esta experiencia, que no pasamos por esto y jamás quisiera saber como se siente. Me duele en alma que nuestras islas vecinas pasaron cosa tan horrible y espero que podamos ayudarla lo mas que podemos. Y que otros países como Cuba, Texas, Miami si lo vivieron, por lo menos en tiempos feos, las personas nos unimos y ayudamos. Espero que no vuelva a ocurrir nada igual y que los humanos nos ayudemos unos a los otros.

 

DJKsDXjV4AAck6S.jpg

Foto por: Adamar Pagán tomada en Trujillo Alto, Encanta, el día después del huracán publicada en Twitter