Parroquias Católicas difieren del rechazo al homosexualismo

     Aunque para muchas personas les parezca incierto, la práctica del acto homosexual no se considera como un impedimento para los miembros de la Iglesia Católica San Jorge en abrir sus puertas a la comunidad Lésbica, Gay, Bisexual y Transexual (LGBT) para que formen parte del ámbito cristiano que se habitúa.

     El cristianismo, como parte de las culturas y costumbres tradicionales que se vive en el país, es una religión que, a pesar de ser la creencia más vivida por la ciudadanía, ha sido criticada, negada y olvidada por residentes puertorriqueños que catalogan el ambiente cristiano como un estilo de vida hipócrita para la sociedad puesto que consideran que rechazan al ser humano que no cumple con los ordenamientos que se presentan en las dogmas del catolicismo, específicamente a las personas que tienen una preferencia sexual opuesta.

     Pero, para la Parroquia San Jorge, todavía les parece inverosímil reconocer el rechazo que han recibido los santuarios, las iglesias y los catedrales católicos alrededor de los años por el juicio que ha creado la misma sociedad en pensar que los templos cristianos no aceptan a los seres humanos ‘pecadores’ como los practicantes del homosexualismo.

     Un afiliado de San Jorge aclaró que “las personas con inclinación al mismo sexo pueden y deben participar de los sacramentos con las debidas disposiciones espirituales como hacen todos los cristianos. Es decir, con el corazón arrepentido y con deseos de vivir en santidad”.

     Además, añadió que “queda claramente establecido que un cristiano no rechaza a nadie. Dios acepta a todos como son, pero eso sí, les dice: Anda, vete y en adelante no peques más. Es decir, no es que rechacemos a nadie, lo que pasa es que no aceptamos el pecado, el comportamiento contrario a la voluntad de Dios”.

     No obstante, un sondeo estadístico realizado para jóvenes entre las edades de 19 a 25 años de edad mostró que un 50 por ciento de los encuestados aciertan en que las iglesias católicas reciben a las personas de la comunidad LGBT, mientras que el otro 50 por ciento difiere ya que opinaron lo opuesto. Con el mismo porcentaje, ciertos sujetos admitieron ser creyentes de la religión católica. Sin embargo, el resto refutaron ser seguidores de dicho dogma.

     En las respuestas individuales que fueron sometidas en el cuestionario, se presentó la pregunta: “Desde su punto de vista, ¿Entiende que la Iglesia Católica acepta o rechaza a la comunidad LGBT?” y tuvo la siguiente respuesta desde una joven universitaria: “No los rechaza, porque todos somos hijos de Dios. Siempre y cuando la persona se comporte sanamente en comunidad es bienvenido, puesto que Dios es quien perdona todos los pecados y una inclinación sexual no determina todo el bien o mal que pueda llevar a cabo un individuo”.

     Por otro lado, la parroquia San Jorge sostuvo que “la plenitud de vida se da cuando se hace de la voluntad de Dios. Las personas con inclinación hacia el mismo sexo están llamados a vivir la virtud de la castidad como cualquier hijo de vecina, casado, soltero, viudo, sacerdote o consagrado a Dios. La sexualidad no es lo más importante en la vida.”

[Imagen por WilfredoCC. Parroquia San Jorge. Licenciado CC.]

     Ciertamente, desde los distritos escolares hasta en la educación continua en las instituciones universitarias (depende de la concentración de estudio) se instruye a la comunidad a comprender el concepto y la importancia de la castidad para los creyentes católicos, pero la humanidad lo ha determinado como una acción absurda (según las conclusiones del sondeo).

     En las ideologías del catolicismo, enumeran en la Congregación para la Doctrina de la Fe en 1975 que, según el orden moral objetivo, las relaciones homosexuales son actos privados de su regla esencial e indispensable. Incluso, para las Sagradas Escrituras, siempre estarán condenados. Y como consecuencia de dichas reglamentaciones, gran parte de la humanidad (en especial los jóvenes), ha optado por alejarse de los templos católicos como símbolo de rechazo a seguir sus doctrinas.

     En conclusión, los templos religiosos de la Isla respetan las decisiones propias que tome la sociedad a la hora de buscar y practicar su espiritualidad, pero no se debe juzgar las ideologías y preferencias que cada individuo tenga. En una pasada conferencia hecha en un vuelo de regreso a Roma con Jorge Mario Bergoglio, actual y primer papa latinoamericano, sostuvo una crítica asombrosa hacia las personas homosexuales: “La gente no debe ser definida solo por sus tendencias sexuales. No olvidemos que Dios ama a todas sus criaturas y que estamos destinados a recibir su amor infinito. Se les puede pedir que recen, mostrarles buena voluntad, el camino y acompañarlos en el mismo”.

[Foto por news.va. Pope Saint Francisco. Licenciado CC.]

     A pesar que la religión católica ha sostenido su criterio solidario hacia la sociedad LGBT, la humanidad juvenil juzga sin considerar que en el cristianismo, la nación es bienvenida.

  • El reporte divulgado no proviene de un noticiario del país. La investigación fue hecha por mi.

[Publicado el 13 de junio de 2016. GIPHY.com. Investigation.]