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{Photo: Election Day by Brooklyn The Borough, Lisence CC}

Sin dudas algunas, el 8 de noviembre de 2016 fue un día histórico tanto como para los Estados Unidos y Puerto Rico. No tan solo en estos dos países sino en el mundo entero. Nosotros los puertorriqueños tendríamos a un nuevo gobernador. Mientras que en Estados Unidos, un nuevo presidente.

Dos presidentes que todos sabemos no estaban aptos y capacitados para poder presidenciar los E.E.U.U., pero que por un lado como decíamos aquí en Puerto Rico, teníamos que votar por el menos malo.

Mientras que aquí en Puerto Rico, teníamos unos buenos candidatos para la gobernación, pero que sabíamos que nunca ganarían. Ya que, nosotros los puertorriqueños somos unas personas que si no es por colores no votamos y eso lo pudimos ver el 8 de noviembre de 2016 a la hora de decir el ganador al candidato de la gobernación.

Yo no tengo nada en contra de ningunos de los partidos, tampoco soy de algún partido en especifico e  incluso vote para hacer el cambio y mi voto sea contado también. No estuve de acuerdo con ninguno de los ganadores, pero las cosas pasan por algo. Yo solo dejo todo en las manos de Dios y que sea lo que el quiera.